sábado, 12 de febrero de 2011

Barbra Streisand

Porque realmente, ¿quién conocía a una actriz como aquella?
¿Qué era aquello realmente? Aquello que pasaba en frente nuestra por simple casualidad, por simple entretenimiento...
Siempre acabamos pensando que habría sido interesante, que por no tirarnos de cabeza perdemos oportunidades. Pensamos, ¿qué habría pasado si...?
Supongo que habría sido una noche diferente que acabaría en decepción, en momentos que sabes que tenías que estar ahí pero que nunca más volverás a ir.
Ni siquiera me dijo su nombre, ni siquiera recuerdo su ropa y sin embargo me dejó pensando días y días y semanas. Son esos momentos que pasan por tu lado rozándote sin que puedas darte cuenta de que las cosas verdaderamente pueden cambiar si nos empeñamos.

Después están esos momentos en los que por no arriesgarnos, preferimos marcharnos. Ese fue uno de aquellos momentos en los que quizás debería haberme quedado, en el que quizás debería de haber hablado más, haber soltado cualquier tontería y conseguir entablar una conversación más interesante aún.
Es más fácil pensar en lo que queremos, es mucho más fácil creer que lo que ya tenemos es mucho mejor sin darnos cuenta que vendrá uno de esos días en los que algo insignificante nos quitará la razón y nos quedaremos vacíos, pensando qué podría haber pasado.

Lo cierto es que aún habiendo ocurrido algo diferente a todo aquello, ese no era el momento adecuado, no era el lugar, ni el día. Quizás una camisa como esa...

No hay comentarios:

Publicar un comentario